jueves, 31 de enero de 2013

Fuiste Mía Un Verano

Fuiste Mía Un Verano es el título de una canción que me gusta mucho por la guitarra, la melodía y la voz profunda del cantante, compuesta por Leonardo Favio, cantante argentino que por desgracia me acabo de enterar que falleció en noviembre de este pasado 2012.


Fuad Jorge Jury, más conocido por su sobrenombre artístico Leonardo Favio (Las Catitas, 28 de mayo de 1938 - Buenos Aires, 5 de noviembre de 2012), fue un productor y director cinematográfico, guionista, compositor, cantante y actor argentino.

Con sus películas ganó premios nacionales e internacionales, considerándosele un director de culto exitoso y respetado. Sus películas Crónica de un niño solo y El romance del Aniceto y la Francisca han sido consideradas como las mejores de la historia del cine argentino.

Como cantante fue uno de los precursores de la balada romántica latinoamericana en las décadas de 1960 y 1970, alcanzando el éxito en toda América Latina. Entre sus canciones más populares se encuentran Fuiste mía un verano, Ella ya me olvidó, Para saber cómo es la soledad (de Luis Alberto Spinetta) y Chiquillada (de José Carbajal). Sus canciones han sido versionadas en más de catorce idiomas.

Una parte sustancial de la vida de Leonardo Favio se relaciona con su adhesión y militancia en el peronismo. Resultado de ello es su película Perón, sinfonía del sentimiento (de 1999), un documental con una duración de 6 horas.

Falleció el 5 de noviembre de 2012, de una neumonía agravada luego de estar varias semanas internado en una clínica de Buenos Aires.




La Letra:

HOY LA VI, FUE CASUALIDAD
YO ESTABA EN EL BAR, ME MIRÓ AL PASAR
YO LE SONREI Y LE QUISE HABLAR
ME PIDIÓ QUE NO, QUE OTRA VEZ SERÁ
QUE OTRA VEZ SERÁ, QUE OTRA VEZ SERÁ
TIERNO AMANECER, SÉ QUE NUNCA MÁS

COMO OLVIDAR TU PELO, COMO OLVIDAR TU AROMA,
SI AUN NAVEGA EN MIS LABIOS, EL SABOR DE TU BOCA
CADA PIBA QUE PASE CON UN LIBRO EN LA MANO
ME TRAERÁ TU NOMBRE COMO EN AQUEL VERANO.

FUISTE MÍA UN VERANO SOLAMENTE UN VERANO
YO NO OLVIDO LA PLAYA NI AQUEL VIEJO CAFÉ
NI AQUEL PÁJARO HERIDO QUE ENTIBIASTE EN TUS MANOS
NI TU VOZ NI TUS PASOS SE ALEJARAN DE MÍ

QUE OTRA VEZ SERÁ, QUE OTRA VEZ SERÁ
TIERNO AMANECER, SÉ QUE NUNCA MÁS


La Canción:



Fuente: Wikipedia

sábado, 26 de enero de 2013

¿El mundo se ha vuelto loco? (IV)

Bueno, hace tiempo que no publico nada por aquí, pero lo de estas noticias se merece un post.



Una mujer se pone veneno en su vagina para matar a su marido con sexo oral.
Una brasileña, que sabía de la afición sexual de su marido por practicarla sexo oral, decidió cargárselo precisamente dándole gusto: le ofreció su vagina pero impregnada de un potente veneno. 

Hay muchas formas de matar, desgraciadamente... pero esta que le vamos a relatar desde luego es muy poco común. Y es que según publican algunos medios de Brasil, una mujer ha sido acusada de intentar asesinar a su esposo poniéndose un potente veneno en su vagina y ofreciéndole sexo oral. Ocurrió en Sao José do Rio Preto y a esta mujer, que sabía del gusto que su esposo tenía por esta práctica sexual, no se le ocurrió otra cosa que utilizarlo para matarle. Eso sí, no debió elegir bien el veneno porque el marido, en cuanto se puso al tema, notó que aquello no olía ni sabía como otras veces. Descartada una cuestión de higiene, la mujer confesó su treta y el pobre marido acudió a un hospital donde le salvaron la vida y al parecer le dijeron que había suficiente veneno como para haber muerto. Y todo por culpa de la vagina asesina de su mujer que, por cierto, está desaparecida.






Mata a mordiscos a su hijo al creerlo poseído Un joven japonés de 23 años ha fallecido como consecuencia de los repetidos mordiscos de su padre.
Éste le atacó para ahuyentar al espíritu que, según pensaba, le tenía poseído.

 La historia la cuenta el portal japonés Japan Daily Press y los detalles son terribles. En Okazaki City, en la Prefctura de Aichi, un joven japonés de 23 años estaba en casa de sus padres cuando comenzó a comportarse de forma extraña. El propio joven proclamaba que era una serpiente. Su madre, preocupada, llamó al padre del joven, Katsumi Nagaya, para alertarle de la situación. Fue peor el remedio que la enfermedad. Nagaya comenzó a morder a su hijo y a golpearle con violencia pensando que, efectivamente, se encontraba poseído por el espíritu de una serpiendete y que este método conseguiría sacar al reptil del cuerpo de su hijo. Nada más lejos. El joven terminó quedando inconsciente y, aunque su familia se apresuró a llevarlo al hospital, las heridas infligidas por los mordiscos de su padre resultaron ser fatales.